jueves, 11 de noviembre de 2010

Archivo II: Testimonio del Inicio del Brote


Atareada corria por el pasillo… Entre el enorme bullicio de gritos de dolor de los pacientes se escuchaba a la recepcionista fatigada por el altavoz:

“Doctor Salazar presentese en Urgencias”

“Jefa de enfermeras A la UCI”

Me sacudi el delantal sapicado de sangre… uno que otro disparo se dejaba oir en el exterior de la clinica, mientras que alli adentro el caos era total… Medicos corrian a un lado, enfermeras al otro… Camillas por doquier, Y pacientes en el suelo…

Desde hace un par de horas todo era normal, hasta que llego el primero… se encontraba completamente descontrolado, habia atacado a uno de los paramedicos mordiendole el brazo y berreaba como un condenado a la horca… Parecia experimentar un estado avanzado de rabia ocasionada por un “Rhabdovirus” con una posible encefalitis aguda, explico el medico tratante al verlo… Aconsejo atarlo a la cama y sedarlo… Identificarlo y contactar con algun familiar para entender como habia llegado a ese estado… Y de pasada tratar al Paramedico que habia sido mordido para evitar infecciones… Una patrulla de policia habia sido enviada a la residencia del paciente para avisar a la familia… De eso hacian ocho horas…

Ahora la cosa era muy distinta… llegaban muchos pacientes con marcas de mordidas, desangrandose, quemados en accidentes, atropellados, baleados… Y otros que estaban en el mismo estado del primer paciente… habia decidido ponerlos en cuarentena en maternidad, mientras que las madres con los recien nacidos fueron derivados a otros lugares… hasta la cafeteria en este momento albergaba pacientes dolidos...

“Dani porfavor podrias reemplazarme un momento, porfavor… Necesito llamar a mi familia”- le roge a una compañera que estaba escribiendo un informe…

“¡Lo siento!... Pero estoy muy ocupada con todos estos pacientes, ademas vienen unos policias en la ambulancia y los oficiales quieren interrogarlos”- respondio atareada ella colocando la tabla del informe bajo el brazo y empezando a trotar por el pasillo.

La segui trotando a su lado y le pregunte: “¿Oficiales?”

“Llegaron los Milicos hace media hora… nos tienen como centro de operaciones… ¿Acaso no has ido al 3 piso?”

“Me tienen asignada a este piso y aquí no he visto ningun uniforme y muy pocos rabiosos”- le explique confundida…

“Makarena”- mi compañera se detuvo un segundo y me miro con el ceño fruncido… “¿Cómo eres tan inocente?... El periodo de incubacion del virus de la rabia es de sesenta dias minimo hasta un año maximo… ¿Crees acaso que es una coincidencia que en 12 horas hayan aparecido tantos casos y la incubacion del virus se haya agilizado tanto?... ¡Esto es cosa del gobierno!… debe ser el resultado de algun experimento loco… por eso nos mandan a los militares”

Recuerdo que me quede parada un minuto cabilando lo que me habia dicho ella… debia ser efecto de las pastillas energeticas que tomaba para poder pasar los turnos… “Mentix”… Son milagrosas… nunca me han fallado, aunque cuando el efecto se empieza a ir solo puedes mantenerte concentrada en una sola cosa… Bueno, sigo con el tema… no me quiero desviar…

Cuando empeze a moverme nuevamente y camine hacia cirugias me vi interceptada por la jefa de enfermeria… una vieja horrible y de mal carácter… aun asi ahora la extraño…

“¿Donde te habias metido Zamora?... Vienen subiendo a unos policias que se estan desangrando y el Doctor Robledo te necesita para atenderlos”

“Lo siento, queria llamar a mi familia es que no se lo que pa…”

“Nada de lo siento… Aquí te pagan por trabajar… No por pasearte como tonta”

Preferi trotar dentro del pabellon a esperar a los policias que seguir escuchandola… (Ahora que lo pienso no la extraño tanto)… Al fondo del pasillo frente al ascensor podia distinguir a dos enfermeras, un enfermero, el doctor Robledo, un tipo que por la cantidad de medallitas que se veian en su uniforme parecia ser un general, coronel o algo por el estilo, y pegado a el un temeroso soldado en traje de combate aferrado a su arma. El doctor me hecho una mirada preocupada cuando me detuve ante ellos acesando, y el oficial tras mirarme fijamente con desprecio se dirigio al doctor:

“Ya estamos todos doctor… ¿Podemos proseguir?”

El Doc asintio con la cabeza, los labios apretados… el ascensor se abrio y el soldado apunto hacia la puerta… yo me asuste y me hice a un lado ante esta actitud… pero del ascensor salieron los paramedicos transportando dos camillas y hablando todos a la vez…

“¡Alto!”- bramo el militar de alto rango… “¡Dejenme interrogarlos!”

“Pero Coronel estos hombres estan agonizando”- se apresuro a contestar uno de los paramedicos

“Me importa un Carajo… Más razon aun para preguntarles entonces”

“Pero señor entienda que si…”- empezo otro de los paramedicos que venian en el ascensor...

El Coronel no hizo caso… se acerco a la primera camilla… era un policia gordo y calvo… pagado de si mismo y cubierto de sangre…

“Oficial… ¿Qué ocurrio en la escena?”- pregunto el viejo militar

Y para sorpresa mia el policia respondio balbuzeando: “La familia… La Familia”

“¿Los Neutralizaron?”- pregunto el Coronel…

“¡Señor el otro policia se esta muriendo!”- chillo una de las enfemeras que un par de veces yo habia visto en las duchas… “¡Dejenos tratarlo por Dios!”

“¡QUE NADIE SE MUEVA… TENGO QUE INTERROGAR A ESTE HOMBRE!”

Y volviendose a la camilla pregunto nuevamente:

“Oficial… ¿Los Neutralizaron?”

El moribundo hombre emitio un par de sonidos inninteligibles y luego añadio:

“No Señor”

El Coronel bajo la cabeza y acto seguido extrajo su revolver...

“Gracias por los servicios Oficial”

Recuerdo que aquellas fracciones de segundo en los que el Coronel levanto su arma y apunto a la cabeza del pobre oficial… creo sentir aun las emociones de ese momento… por el rabillo del ojo ver como los paramedicos empezaban a moverse lentamente… como en Stop Motion, para poder detener lo que el Coronel iba a hacer…

El Disparo resono fuertemente dentro de aquel pasillo cerrado y el policia gordo convulsiono un par de segundos antes de quedarse inmovil… Corri como una loca hasta ponerme al lado de la camilla…

“¡Que Mierda hizo!”- chille con odio tomando los signos vitales del oficial aunque sabia que era un vano…

El Dr. Robledo se acerco tambien pero no se pronuncio sobre el tema… tan solo anoto la hora de la muerte y ordeno a los furiosos paramedicos que se llevaran el cuerpo… como si lo que en aquel momento hizo el militar fuese lo más natural del mundo…

“¡No le van a decir nada a este desgraciado!... ¡Acaba de asesinar a un hombre!... ¡Aun podiamos salvarlo!”- recuerdo que grite angustiada…

“Makarena… Te ordeno que te calles”- me susurro el Doc de pasada mientras se acercaba a la otra camilla a ver al segundo policia…

El Coronel ya estaba frente al segundo policia… pero este descansaba ya sin vida… y cuando lo contemple me di cuenta que aquel era uno de los policias que habian enviado a buscar a los familiares del primer paciente… entonces… ¿Los familiares tambien tenian rabia acaso?... recuerdo que fue lo último que paso por mi mente… Antes de que el Coronel apuntara esta vez al policia muerto…

“Debemos evitar que se sigan levantando”- le explico el Oficial al Doctor…

Mas… el destino habria de ser diferente… desgraciadamente… aquel policia estiro los brazos y abrazo al Coronel… acto seguido lo mordio en el cuello…

El Hombre grito como un loco pidiendo ayuda… el revolver de el trazo una breve trayectoria antes de chocar con la muralla y caer al suelo… las enfermeras chillaron horrorizadas y huyeron…

El soldado corrio a socorrer al Coronel que en cuestion de segundos habia dejado de moverse…

“¡Makarena sal de aqui!”- me grito el Dr. Robledo apartandome hacia atrás…

En shock me di vuelta y choque con el otro enfermero que se habia quedado paralizado viendo la escena…

“¡VAMOS!... ¡VAMOS!”- le chille histerica al chiquillo…

Varios gritos y disparos se dejaron oir… instintivamente me arroje al piso… el enfermero que estaba a mi lado cayo tambien al piso pero alcanzado por una bala en el torax… cuando mire hacia atrás pude comprender la situacion… El Coronel tambien se habia levantado y atacaba salvajemente al soldadito que lo acompañaba anteriormente… y este trataba de quitarselo de encima moviendose y gritando descosidamente apretando el gatillo con desesperacion y moviendo el arma en todas direcciones como si fuera un pañuelo…

El doctor tenia fuertemente agarrado al segundo policia por la cabeza tratando de inmovilizarlo con poco éxito…

“¡DANIEL!”- chille yo al Medico aterrada…

“¡MAKARENA TE DIJE QUE TE VAYAS!”- me respondio el…

Pero yo no necesite pensarlo más… fije la vista en mi objetivo y me lanze hacia el… cuando pude alcanzar el revolver que el Coronel habia dejado caer, el Doctor Daniel Robledo imprimio toda la fuerza de sus brazos en un solo movimiento, logrando doblar la cabeza del policia hacia un lado… se escucho un sonido sordo cuando el cuello del poli se quebro…

“¡Daniel… los Otros!”- le grite… y poniendo la mano sobre el revolver lo hice rodar por el suelo en direccion al Doctor…

Y este lanzando el cuerpo inerte del policia a un lado se dejo caer al suelo y al capturar el arma la enarbolo en direccion a los dos militares que se encontraban a escasos metros…

¿Para que contarles el resto?... Aquí estamos los dos, Daniel y yo… junto a ustedes, los pocos que quedamos en esta plaga inmunda… ¿Rabia?... Ja, por dios… Daniela la enfermera que me dijo aquello fue la primera en darse cuenta… Me dio a entender que no confiara en nadie con aquel comentario… pero hoy… tiempo despues de todo eso he descubierto que el confiar en los demas es lo que nos siguen manteniendo con vida… Lo que aun nos mantiene de pie, lo que aun nos permite recordar el mundo antes de esto… Uno de ustedes ya le dio un nombre… Un nombre bastante original para algo tan horrible… Romero… Virus Romero…

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